La superioridad era claramente favorable a Peñarol, un equipo intenso que hasta físicamente se imponía a su tradicional rival. Individualmente, a Nacional le costaba encontrar James Feldeine y Luciano Parodi. Al término del primer tiempo, la diferencia era de 43-30 a favor de los visitantes.
Los 13 puntos de diferencia se ajustaban al trámite, en el que el conjunto aurinegro era netamente dominador e incluso llegó a tener una máxima de 14 de ventaja, pese a que el elenco tricolor disimuló la inferioridad y pudo ponerse a uno.
La figura en los mirasoles era Vescovi, con 100% de efectividad en 16 minutos en cancha hasta entonces: 20 puntos, tres de ellos en triples y cuatro en dobles. En el tricolor, Espíndola era el máximo goleador con nueve.
Lo liquidó en el tercer cuarto
El tercer cuarto terminó con un resultado de 63-45 a favor de Peñarol, considerable diferencia de 18 puntos que parecía reflejar que el elenco aurinegro se quedaría con el clásico.
Finalmente, el equipo de Leandro García Morales cerró la victoria por 87-62, es decir, con una diferencia de 25 puntos sobre el conjunto de Álvaro Ponce. Los carboneros dominaron de principio a fin y se quedaron con un merecido contundente triunfo.
Vescovi, en su retorno al país y en su debut en la Liga Uruguaya, fue la gran figura de la cancha con 30 puntos anotados. El jugador de la selección celeste aportó 5/8 triples y 5/5 dobles. Espíndola fue el máximo goleador de Nacional con 13 anotaciones. Nicola Pomoli de Peñarol fue el más destacado en rebotes: 12.