El mensaje político de Mamdani resonó ante una multitud eufórica. “Si alguien puede mostrar a una nación traicionada por Donald Trump cómo derrotarlo, es la ciudad que lo vio nacer”, afirmó. Y agregó: “Si hay alguna forma de aterrorizar a un déspota, es desmantelando las condiciones que le permitieron acumular poder”.
El momento más comentado de la noche llegó cuando el alcalde electo miró a cámara y lanzó un reto directo al mandatario: “Donald Trump, ya que sé que está viendo esto, tengo cuatro palabras para usted: suba el volumen (‘turn the volume up’)”. La frase encendió a los asistentes, que respondieron con una ovación prolongada.
Medidas sociales
Mamdani llega al gobierno con un programa centrado en medidas sociales como congelar los alquileres, ofrecer transporte público gratuito y garantizar guarderías sin costo para los niños hasta los cinco años. Su enfoque apunta a combatir las desigualdades estructurales que han expulsado a miles de neoyorquinos de sus barrios.
El New York Times describió su victoria como “una voz electrizante para los neoyorquinos desilusionados por el desorbitado costo de vida y una vieja guardia plagada de escándalos”. En su discurso, Mamdani reforzó esa visión: “En este momento de oscuridad política, seremos la luz”.
El nuevo alcalde no elude su identidad ni su ideología. “Soy musulmán. Soy socialista democrático. Y, lo más grave de todo, me niego a pedir disculpas por ello”, dijo para reafirmar una postura que desafía las líneas tradicionales del poder en Estados Unidos.
La respuesta de Trump
El triunfo de Mamdani es también un golpe político para Trump. En los meses previos, el presidente había denostado públicamente al candidato, acusándolo de “radicalizar Nueva York” y amenazando con retirar fondos federales si resultaba electo. La victoria del joven socialista se interpreta, entonces, como una respuesta ciudadana a las políticas de exclusión y racismo impulsadas desde la Casa Blanca.
Tras conocerse los resultados, Trump publicó en su red social Truth Social un mensaje enigmático que coincidió con el discurso del nuevo alcalde: “...¡Y así comienza todo!”. La frase, sin contexto, fue interpretada por analistas como una advertencia de confrontación política o, al menos, el reconocimiento de un nuevo adversario con proyección nacional.
Zohran Mamdani derrotó a sus rivales electorales y se convirtió en símbolo de una nueva corriente que desafía el status quo estadounidense desde la cuna del capitalismo.