"Yo no creo que el plan sea electoral...yo creo que se están jugando cosas demasiado grandes a nivel geopolítico...Tienes acciones violentas, tienes hechos vandálicos dentro del umbral del terrorismo urbano... ataques a infraestructuras públicas, farmacias, centros de alimentación, rutas de transporte, es decir, también con un aspecto de clase y de identidad política, porque justamente también se juegan aquí elementos económicos, simbólicos, sociológicos", explicó.
El segundo momento se dio cuando el proceso entró en una fase de contencioso electoral en el Tribunal Supremo de Justicia (TSJ). Y finalmente, el tercer momento fue una manifestación convocada por un sector de la oposición, la cual no alcanzó las expectativas esperadas, lo que llevó a cuestionar la fortaleza del liderazgo de María Corina Machado.
"Esta semana también se prevé, quizás esta semana o la siguiente, que haya una decisión desde el TSJ que ya le daría que un cierre jurídico legal a todo el tema de la controversia postelectoral", adlantó.
Las verdaderas intenciones de la oposición
Para Serafino la oposición y ciertos actores internacionales no buscan simplemente ganar elecciones, sino eliminar cualquier fuerza política que promueva el control público y soberano de los recursos naturales de Venezuela. En sus palabras, "hay una agenda clara de exterminio de toda fuerza política soberanista en Venezuela".
Argumentó que la oposición busca plantear una especie de exterminio del chavismo, no solo desde un punto de vista político, sino también social y cultural. Esto se reflejaría en intentos de deslegitimar y proscribir al chavismo, marginalizándolo dentro de su propio país. Este objetivo, según Serafino, solo podría lograrse mediante la violencia y un cambio de régimen forzado, ya que las normas de la democracia liberal no permitirían erradicar al chavismo, que sigue siendo una fuerza política significativa en Venezuela.
La discusión de Serafino también abarcó la importancia geopolítica de Venezuela y la urgencia por definir su rol en la transición de poder mundial. Según su análisis, "hay una prisa por controlar los recursos naturales de Venezuela, lo cual no puede esperar los tiempos de una transición electoral convencional". Esto explica por qué los actores opositores y ciertos intereses internacionales buscan una disrupción rápida y violenta en lugar de una competencia electoral prolongada.
Embed - Pasaron Cosas lunes 19 de agosto 2024