A esto, Abdala agregó que el objetivo es “que no quede nadie por debajo de esta cifra del salario mínimo nacional” y “restituirle a la gente el derecho a poder optar, si así las condiciones materiales de su vida se lo permiten, por jubilarse a los 60 años. Este es un derecho que fue confiscado en la ley 20.130, que cambió de 35 años de trabajo y 60 para jubilarse a 65 años para jubilarse”.
Si se analizan las condiciones actuales del mundo del trabajo, siguió, “son notorias las penurias que genera el actual mundo del trabajo, caracterizado por que se pasó de 450.000 personas que ganan menos de 25.000 pesos a 550.000, y que está bastante difícil mantener actividad de pleno empleo hasta el final de la vida laboral para las personas. Si una persona con más de 50 años pierde su trabajo, es realmente difícil reinsertarse en el mercado con las condiciones que tenía”.
La reacción de Saldain
Tras la presentación de Abdala, Saldain, redactor del actual marco legal de la seguridad social, tomó la palabra para “soltarle los perros” al presidente del Pit-Cnt: “No es ninguna sorpresa que no tengo ninguna coincidencia con lo que acaba de decir Marcelo Abdala”, y dijo que conoce afirmaciones que “no están respaldadas en ningún documento que se pueda ver”.
Los promotores de la reforma constitucional que se someterá a las urnas, sostuvo el abogado, “han hecho discursos sin un solo dato, sin un solo número que pueda ser contrastado. Sí tenemos una diferencia sustancial, y otra no menor es pensar que porque se proponga cambios en el artículo 67 de la Constitución se está creando o estableciendo un derecho humano fundamental. El derecho humano existe y preexistente reconocido por el derecho internacional y por el derecho nacional”.
Y siguió con lo más “picante”: “Probablemente la discrepancia fundamental esté en otro lado, y es qué tipo de sociedad queremos. Creo que ahí está la principal diferencia. ¿Qué camino nos proponen el PIT-CNT, el Partido Comunista, del que, si no me equivoco, Abdala integra su comité central, y el Partido Socialista? ¿Cuál es la sociedad que nos proponen? Nos proponen exactamente el camino contrario. Es el camino de Argentina. Sin más ni menos. Exactamente la estatización de los fondos jubilatorios fue el camino argentino del año 2008”.
Y se picó
Luego de esta exposición de Saldain, Abdala pidió la palabra y la “cosa se picó”. El dirigente sindical no se quedó callado: en este período de gobierno “se profundizó el modelo de la desigualdad, del cual es parte sustantiva la ley 20.130, que ha llevado a que crezca la pobreza, a que aumente el producto bruto interno y se achicara la masa salarial”, le espetó.
“Confieso que nos gustaría una sociedad mucho más democrática, igualitaria y equitativa. Sí estamos hablando de construir una sociedad mejor, acá no se trata de agitar el cuco, sino de elevar el nivel de discusión”.
“Lo que sí se puede contrastar es quién fracasó y quién no. El modelo de la desigualdad, lo digo con respeto y para que usted -refiriéndose a Saldain- no se ofenda, el modelo de las AFAP, fracasó. Dijeron que los trabajadores, después de trabajar toda una vida, casi que podrían hacer turismo espacial, y tanto fracasó que tuvieron que hacer otra ley. Les salió espantoso”.
Saldain no se aguantó y retrucó: “En fin, tampoco sorprenderá que no tenga ningún punto de acuerdo, y mucho menos cuando el expositor ha demostrado ignorancia básica en las cosas dichas”.
Y Abdala le respondió: “Yo no falté el respeto”.
“Sí que lo faltó”, le contestó Saldain.
“Yo a usted no lo acusé de ignorante ni de defender el capital financiero”, remató Abdala.