El gremio informó además que, en una instancia reciente de negociación, las autoridades del Mides se comprometieron ante la dirección sindical a comunicar el viernes 28 la viabilidad de liberar las partidas a partir del 1º de diciembre, de modo que los trabajadores pudieran cobrar sus salarios atrasados.
Sutiga agradeció la asistencia recibida por parte del movimiento sindical, que entregó alimentos para apoyar a más de cien trabajadores afectados. También anunció que la problemática será planteada en el XX Congreso de FUECYS los días 1º y 2 de diciembre, en un contexto que califican como crítico por “inseguridad alimentaria” y riesgo de desalojos, especialmente en hogares monoparentales.
El sindicato adelantó que esta semana celebrará una nueva asamblea y que, de persistir la falta de respuestas, profundizará sus medidas. Finalmente, exhortó al Poder Ejecutivo a corregir la situación, al afirmar: “deberá encontrar los mecanismos de corregir en forma definitiva e inmediata esta situación a la cual se nos somete como trabajadores, sean coherentes con sus definiciones”.
"Excusas de mal pagador"
Caras y Caretas dialogó con representantes de Sutiga, Valentina Vicente y Jacobo calvo, quienes explicaron que los atrasos salariales no son un fenómeno reciente, sino que el problema se remonta “desde la fundación del Mides”, cuando el ministerio comenzó a funcionar bajo un esquema de tercerización. Aunque aclararon que nunca antes la situación había sido tan prolongada como la actual, en la que hay trabajadores “hace tres o cuatro meses sin cobrar”.
Los voceros aseguraron que el número de personas afectadas aumenta semana a semana. Hasta hace unas semanas contabilizaban unas 500, pero informaron que los últimos días se sumaron nuevas organizaciones y estiman que serán “más de 800 personas” las que enfrentarán irregularidades en el cobro de sus salarios.
Consultados sobre el reparto de responsabilidades entre las organizaciones contratadas y el Mides, señalaron que si bien "el eje de la discusión ya no pasa por determinar culpas", entienden que la responsabilidad es de la cartera "por el mero hecho que es quien decide terciarizar”. En tal sentido, explicaron que la ley de tercerización establece que cuando la empresa secundaria no puede hacerse cargo de las obligaciones laborales, la empresa primaria está obligada a retribuir esos incumplimientos.
Sin negociación
Sobre la última instancia de intercambio con las autoridades, relativizaron la existencia de un proceso real de negociación. “Ellos lo quieren plantear como una negociación, pero acá no hay ninguna negociación”, afirmaron, recordando que desde mayo vienen advirtiendo que la situación se agravaría. Indicaron que las respuestas oficiales se limitan a explicaciones administrativas sobre auditorías, problemas contables o rendiciones deficientes, lo que calificaron como “excusas de mal pagador”.
También cuestionaron que una organización pueda normalizar que las condiciones laborales dependan del flujo de partidas estatales. Señalaron que no pueden aceptar que se les diga que “trabajar para Mides es así”, porque la empresa contratada tendría que garantizar el pago “independientemente de cómo ellos se manejen”.
Los representantes del sindicato enfatizaron en las consecuencias directas de los atrasos: trabajadores con dificultades para acceder a alimentos, medicación y situaciones de vivienda extremadamente críticas. “Hay gente que ya fue desalojada, o sea, ya pasamos del peligro de desalojo a gente desalojada”, aseguraron. A pesar de haber trasladado estos casos al ministerio, afirmaron que no recibieron soluciones: solo promesas de “alguna flexibilidad”, sin medidas concretas.
Próximas medidas
Indicaron que, aun sin cobrar, “la gran mayoría” de los trabajadores continúa cumpliendo tareas. Sin embargo, denunciaron que algunas organizaciones reemplazan a quienes realizan paros o medidas gremiales con voluntarios, generalmente allegados, lo que “revienta la huelga”.
Sobre las medidas previstas en caso de no obtener respuestas, adelantaron que el sindicato resolvió sostener una asamblea permanente dentro de refugios y que repetirán la modalidad en otros centros. Además, anunciaron un paro para el 24 y 25 de diciembre, días en los que trabajan aun sin haber cobrado, con el objetivo de “poder al menos estar con nuestra familia”.
Finalmente, informaron que la problemática fue planteada en el Congreso de Fuecys, donde participan también autoridades sindicales nacionales. Expresaron que tanto el Pit-Cnt como el Ministerio de Trabajo están al tanto de la situación y concluyeron que “vamos a seguir luchando y peleándola donde sea”.